Las dificultades son señales. A veces nos indican que debemos cambiar de dirección. Otras veces nos indican que debemos poner más empeño aún en la misma dirección. ¿De qué depende el sentido que le demos en cada caso? A veces el único faro de discernimiento es la intuición. Incluso con ella nos podemos equivocar. Pero ningún error perdura para siempre, ni hay cuerpo que lo soporte.
AUTOESTIMA
lunes, 28 de marzo de 2011
FRASES DE ERICH FROMM
El amor infantil sigue el principio: Amo porque me aman. El amor maduro obedece al principio: Me aman porque amo. El amor inmaduro dice: Te amo porque lo necesito. El amor maduro dice: Te necesito porque te amo.
Para la mayoría de la gente, el problema del amor consiste fundamentalmente en ser amado, y no en amar, no en la propia capacidad de amar.
LOS SUEÑOS SEGUN JÜNG
Los sueños son el camino principal para acceder a los contenidos inconscientes, ya que suelen ser símbolos cuyos significados proceden de un trastorno emotivo en el que se encuentran implicados los complejos, que son los centros sensibles de la psique que se movilizan frente a cualquier estímulo o perturbación externa.
Los sueños tienen la intención de transmitir algo difícil de descifrar, porque no tienen la misma dinámica de los acontecimientos del estado de vigilia, ya que las dimensiones de tiempo y espacio son diferentes.
Para Freud algunos sueños expresan alegóricamente los deseos sexuales, pero Jung piensa que pueden contener un mensaje diferente.
Jung considera que existen muchos símbolos sexuales; y el hecho que una persona elija uno símbolo y no otro, debe tener también un profundo significado.
Por esta razón, decide poner énfasis en el contenido total del sueño, o sea a su descripción íntegra, aunque al soñante le resulte por demás repulsiva o falsa.
Todas las cosas que nos ocurren permanecen en el inconsciente aunque las olvidemos conscientemente.
Jung nos cuenta el caso de una paciente que fue internada en la clínica en completo estado de estupor. Al día siguiente, cuando recobró la conciencia, sabía quién era pero no sabía cómo había llegado hasta allí.
Sin embargo, en estado de hipnosis, recordó todos los detalles de lo que le había pasado, su internación en la clínica, la hora que registraba el reloj de la entrada, y quien la había admitido. O sea que su memoria era perfecta bajo hipnosis.
Jung descubre que el inconsciente no solamente contiene experiencias del pasado sino que también contiene gérmenes de futuras ideas creativas y pensamientos nuevos que antes no fueron conscientes.
Considera que surgen de las profundidades de la mente y forman parte importante de la psique.
Esto se puede observar en la vida cotidiana donde los problemas se pueden resolver algunas veces de la forma más sorprendente y también en la historia de la ciencia.
Las investigaciones de Jung sobre los sueños lo convencieron que las asociaciones e imágenes que aparecen en ellos son parte del inconsciente y no “remanentes arcaicos” de etapas tempranas del desarrollo individual, que se pueden observar en cualquier persona, independientemente de su cultura, educación, inteligencia o aptitudes personales.
Estas asociaciones históricas representan la conexión entre el mundo consciente y el mundo del instinto.
La función de los sueños en general es tratar de recuperar el equilibrio psicológico, compensando las deficiencias de la personalidad y advirtiendo de los riesgos de la vida presente.
Por esta razón es importante prestarles atención para evitar accidentes de toda índole.
Los sueños por lo tanto pueden anunciarnos acontecimientos que aún no han ocurrido pero que pueden llegar a ocurrir. Pero no se trata de precognición ni de algo milagroso sino del verdadero conocimiento de lo que nos puede pasar si continuamos cometiendo errores o sometiéndonos a riesgos, información que en la vida consciente no registramos.
Los sueños se originan en nuestra propia naturaleza más que humana que está representada más en la sabiduría de la mitología y las leyendas que en la consciencia del hombre moderno, que ha perdido sus instintos.
Este instinto es el que desempeña un rol vital en la función compensadora de los sueños.
Cuanto más conectados estén el consciente y el inconsciente mayor será la salud psíquica. Los símbolos de los sueños son los mensajes de nuestra parte de la mente instintiva a nuestra parte de la mente racional.
lunes, 21 de marzo de 2011
UN BUEN LIBRO QUE ACONSEJO
País: España
Año de publicación: 2010
Del mismo autor de Vivir es un asunto urgente y Madera de líder, ahora llega Reinventarse, un libro que invita a sus lectores a caminar en este proceso de auto descubrimiento en el que de forma progresiva irá comprendiendo que lo que hay dentro de él es un espacio sorprendente y mágico.
Este libro expone los aspectos menos conocidos y más importantes del funcionamiento de la mente humana. Invita a adentrarse un poco más en la verdadera realidad de cada uno, darse cuenta de que gran parte de la angustia y el sufrimiento que experimentamos en la vida es optativo y que nuestra naturaleza fundamental es fuente de Energía, de sabiduría, de Serenidad, de Alegría, de, de Creatividad y de Amor.
El autor es el Dr. Alonso Puig, Médico Especialista en Cirugía General y del Aparato Digestivo, Fellow de la Harvard University Medical School y miembro de la New York Academy of Sciences y de la Asociación Americana para el Avance de la Ciencia. Es uno de los expertos más demandados por las empresas y administraciones públicas para impartir conferencias y seminarios sobre liderazgo, creatividad, innovación empresarial y gestión del cambio.
De acuerdo con Alonso Puig, varias investigaciones han confirmado que los pensamientos positivos fortalecen nuestro sistema inmunológico a la vez que los negativos nos debilitan. El autor manifiesta su sorpresa ante la cantidad de recursos y posibilidades que los seres humanos tenemos en nosotros mismos y que aún no hemos descubierto en nuestro interior: “Una vez que la persona descubre que los tiene y los potencia puede crecer de una manera sorprendente”.
miércoles, 16 de marzo de 2011
¿BUENA SUERTE O MALA SUERTE?
Había una vez un hombre que vivía con su hijo en una casita del campo. Se dedicaba a trabajar la tierra y tenía un caballo para la labranza y para cargar los productos de la cosecha, era su bien más preciado. Un día el caballo se escapó saltando por encima de las bardas que hacían de cuadra. El vecino que se percató de este hecho corrió a la puerta de nuestro hombre diciéndole:
-Tu caballo se escapó, ¿que harás ahora para trabajar el campo sin él? Se te avecina un invierno muy duro, ¡qué mala suerte has tenido!
El hombre lo miró y le dijo:
-¿Buena suerte o mala suerte? Sólo Dios lo sabe.
Pasó algún tiempo y el caballo volvió a su redil con diez caballos salvajes con los que se había unido. El vecino al observar esto, otra vez llamó al hombre y le dijo:
-No solo recuperaste tu caballo, sino que ahora tienes diez caballos más, podrás vender y criar. ¡Qué buena suerte has tenido!
El hombre lo miró y le dijo:
-¿Buena suerte o mala suerte? Sólo Dios lo sabe.
Más adelante el hijo de nuestro hombre montaba uno de los caballos salvajes para domarlo y calló al suelo partiéndose una pierna. Otra vez el vecino fue a decirle:
-¡Qué mala suerte has tenido! Tu hijo se accidentó y no podrá ayudarte, tu eres ya viejo y sin su ayuda tendrás muchos problemas para realizar todos los trabajos.
El hombre, otra vez lo miró y dijo:
-¿Buena suerte o mala suerte? Sólo Dios lo sabe.
Pasó el tiempo y en ese país estalló la guerra con el país vecino de manera que el ejército iba por los campos reclutando a los jóvenes para llevarlos al campo de batalla. Al hijo del vecino se lo llevaron por estar sano y al de nuestro hombre se le declaró no apto por estar imposibilitado. Nuevamente el vecino corrió diciendo:
-Se llevaron a mi hijo por estar sano y al tuyo lo rechazaron por su pierna rota. ¡Qué buena suerte has tenido!
Otra vez el hombre lo miró diciendo:
-¿Buena suerte o mala suerte? Sólo Dios lo sabe
LA STEVIA
Stevia |
Son hierbas y arbustos de la familia del girasol (Asteraceae), nativa de regiones subtropicales y tropicales de Suramérica y Centroamérica. Una de sus especies, Stevia rebaudiana, nombrada así por Moisés de Santiago Bertoni, conocida comúnmente como "dulce hoja", o, simplemente, "estevia", es ampliamente cultivada por sus hojas dulces.
Las hojas de las plantas de este género tienen un dulzor más tenue al principio de su degustación y una duración más larga que los del azúcar común, aunque algunos de sus extractos pueden tener un sabor amargo o con un gusto parecido a los de las plantas de la especie Glycyrrhiza glabra en altas concentraciones.
Por la singularidad de ser los extractos obtenidos de las plantas de este género hasta 300 veces más dulces que el azúcar común, el género ha ido llamado la atención con la creciente demanda de alimentos con bajos contenidos de carbohidratos y azúcares.
Las investigaciónes médicas que se han realizado acerca de ciertas especies del género han demostrado sus posibles beneficios en el tratamiento de la obesidad y la hipertensión arterial porque el consumo de los extractos de sus plantas tiene un efecto insignificante sobre los porcentajes de glucosa en la sangre, lo que también hace atractivos a estos para usos no medicinales como edulcorantes naturales. Sin embargo, las controversias políticas han limitado su disponibilidad en muchos países, por ejemplo, los Estados Unidos los prohibió a principios de 1990 a menos que la etiqueta del envase los indicara como un suplemento. Se utilizan ampliamente como edulcorantes en el Japón, Chile y México producido por la empresa Iansa, y en Colombia es producido por la S. A. Incauca. Ahora está disponible en el Canadá como un suplemento dietético.También en España.
lunes, 14 de marzo de 2011
ALOE. ALGUNAS PROPIEDADES
Desde tiempos muy remotos, el áloe ha formado parte de los remedios más preciados debido a su capacidad para curar todo tipo de heridas. Ya en el año 2100 a.C., una tabla de arcilla sumeria explica sus virtudes; se ocupa de él el famoso papiro de Ebers, hacia el 1550 a.C.; y también aparece citado en la Biblia. Todas las grandes culturas han conocido y disfrutado de esta planta, para la que no han escatimado elogios sobre sus propiedades rejuvenecedoras. Los egipcios la denominaban «planta de la inmortalidad»; los indios, «la sanadora silenciosa»; para los sumerios era «la planta de la virtud mágica»; en la antigua China se la conocía como «el remedio armonioso»; «azucena del desierto» entre los tuareg; «elixir de la longevidad» para los rusos; los indios seminolas de Florida la llamaban «fuente de la juventud»; «elixir de Jerusalén» los templarios; y «sanadora natural» y «planta del milagro» los monjes medievales.
También los grandes hombres y mujeres de la Antigüedad alabaron las virtudes de esta planta. El rey Salomón la cultivaba debido a sus propiedades terapéuticas; Nefertiti y Cleopatra, las dos reinas egipcias, la utilizaban para resaltar su belleza; Alejandro Magno fue incluso más allá y, siguiendo el consejo de su maestro Aristóteles, llegó a conquistar una isla (Socotra, en el Océano Índico) en la que el áloe se cultivaba en grandes cantidades, ya que sus soldados lo necesitaban para curarse las heridas.
Incluso ha estado presente en algunos acontecimientos relevantes de la Historia. En su diario de navegación, Cristóbal Colón anotó: «Todo está bien, hay áloe a bordo». También hizo otra acotación: «Cuatro vegetales son indispensables para la salud del hombre: el trigo, la vid, el olivo y el áloe. El primero lo nutre, el segundo le alegra el espíritu, el tercero le aporta armonía y el cuarto lo cura». Más cercano a nuestra época, Mahatma Gandhi declaró: «¿Me pregunta qué fuerzas secretas me sostuvieron durante mis largos ayunos? Pues fueron mi gran fe en Dios, mi estilo de vida simple y frugal y el áloe, del cual descubrí sus beneficios al final del siglo XIX, cuando llegué a Sudáfrica».
A pesar de esta larga tradición, no ha sido sino hasta hace un par de décadas cuando el áloe ha atraído el interés de científicos de todo el mundo, estimulados, principalmente, por la industria cosmética, que encontró en esta planta, en concreto en el áloe vera, uno de los mejores remedios para aliviar diferentes afecciones de la piel. Posteriores investigaciones han hallado que otra subespecie, la arborescens, es incluso más eficaz para combatir trastornos relacionados con el sistema inmune, incluyendo el cáncer.
Cáncer de próstata
En 2001, un grupo de científicos italianos, encabezados por el doctor Libertario Raffaelli, llevó a cabo un estudio con 31 pacientes con tumores de próstata y otros 29 con otras patologías urológicas, a los que se les suministró un preparado estándar de áloe arborescens. Los datos preliminares de dicho estudio, que acaban de ser presentados en Expovital, muestran una disminución de las infecciones urinarias difíciles, la remisión de tumores en tres de los pacientes oncológicos y una estabilización de la enfermedad en el resto.
A estos beneficios terapéuticos hay que añadir, según el doctor Raffaelli, la práctica ausencia de efectos secundarios: «La tolerancia ha sido óptima, con un solo caso de problemas gástricos y otro de náuseas». Sin embargo, como otros productos que contienen antraquinonas (con efectos laxantes y purgantes), el áloe está contraindicado durante el embarazo y la lactancia. Además, señala el doctor Raffaelli, es necesario prestar especial cautela o consultar al médico en caso de dismenorrea, enfermedad de Crohn, colitis ulcerosa, apendicitis u otras enfermedades inflamatorias intestinales, dolor abdominal de causa desconocida, insuficiencia renal y trasplantes o transfusiones recientes.
Las posibilidades de esta variedad del áloe en urología están empezando a despuntar, destaca el doctor Raffaelli: «El interés por el áloe arborescens en urología como inmuno-regulador, antioxidante y antitumoral es muy reciente y surgió a partir de la publicación de un libro del padre Romano Zago, en el cual se le describe como una ‘cura’ de tumores prostáticos y vesicales. Las características antibacterianas de la planta la convierten en interesante para la cistitis y la prostatitis, mientras que su poder antioxidante puede ser útil desde el punto de vista andrológico (fertilidad y sexualidad) y en patología degenerativa, como la cistitis intersicial (inflamación crónica de la pared de la vejiga)».