Juana Labrador, presidenta de la Sociedad Española de Agricultura Ecológica (SEAE)"Los alimentos ecológicos son más seguros y saludables que los convencionales"
Los
alimentos procedentes de la agricultura y ganadería convencionales no
respetan el medio ambiente ni la salud de los consumidores. Por ello,
los ecológicos, aunque sean entre un 10% y un 30% más caros, son la
mejor elección. Así lo señala la doctora Juana Labrador Moreno,
presidenta de la SEAE. Esta profesora de Fisiología Vegetal y
Agroecología de la Universidad de Extremadura explica que, a pesar de
las campañas de desprestigio, los alimentos eco son más seguros al pasar
un doble control. También destaca que son más saludables y ofrecen unas
condiciones más justas para toda la cadena alimentaria.
¿En qué consiste la agricultura y ganadería ecológica?
Es un modelo de gestión agrosistémica para producir alimentos de
calidad de forma eficiente y mejorar la fertilidad del suelo, la calidad
del agua, la biodiversidad y adaptarse al cambio climático. Abarca toda
la cadena alimentaria y se basa en una ciencia, la agroecología, y en
el "saber" tradicional y local. Además, está legislado por una normativa
europea muy rigurosa, el Reglamento 834/2007.
¿Por qué los alimentos ecológicos son más caros?
Se puede pagar entre un 10% y un 30% más que los convencionales. Hay
un "diferencial" por las necesidades ecológicas (evita pesticidas,
herbicidas y fertilizantes químicos de síntesis, y cualquier transacción
debe beneficiar a toda la cadena alimentaria). No obstante, en la
mayoría de los casos el precio se dispara arbitrariamente, sobre todo en
el producto fresco, por intereses externos al sector.
¿Merece la pena pagar más?
El consumidor debería saber las consecuencias para la salud y el
medio ambiente de la producción convencional, o el precio que se le paga
al agricultor, y que luego escoja. Cuando se mejore la producción y
distribución interna el precio bajará.
¿Los alimentos convencionales que consume la mayoría de los ciudadanos no respetan el medio ambiente ni la salud?
Sí. Vivimos inmersos en el medio natural, de forma que quién lo
contamina perjudica directamente nuestra salud y calidad de vida; como
ejemplo, el riesgo de las poblaciones del medio rural frente a
determinados cánceres es mayor que el de la población general. Si se
valoran las consecuencias ambientales, sociales y económicas, la
producción ecológica gana por goleada.
¿Qué opina de las
alarmas de seguridad alimentaria en productos ecológicos? Los casos de
contaminación por E.coli se relacionaron con la agricultura ecológica.
Algunas alarmas han servido para destapar grandes escándalos, como
los pollos con dioxinas, las "vacas locas" o la leche contaminada china.
Otras sirven para intereses comerciales muy claros, como la falacia de
los pepinos eco contaminados. Tiró una excelente producción y "obligó" a
bajar los precios al sector eco en otros productos.
La Autoridad Europea de
Seguridad Alimentaria emite cinco o seis alarmas anuales por
micotoxinas y E. coli relacionadas con producción ecológica. ¿Son
seguros estos alimentos?
Sí, más que los convencionales, porque pasan los controles de
cualquier alimento y los relacionados con sus propias normativas. Y son
más saludables, porque carecen de biocidas y contienen más nutrientes,
vitaminas, antioxidantes y fibra. Si alguien lo hace mal debe responder
por ello, pero no el modelo ni el sector.
España es uno de los principales productores de agricultura ecológica, pero gran parte de su producción se exporta.
En la actualidad, con un mercado exterior tan vulnerable, se vuelven
los ojos al interior. Sin embargo, la administración sigue sin un
interés real, el sector no tiene cohesión para crear una red sólida,
salvo honrosas excepciones, y muchos consumidores siguen vapuleados por
campañas de desprestigio de potentes sectores económicos interesados.
¿Es ecológico exportar a otros países en camión?
Lo más ecológico sería consumir local y de temporada, pero el
producto exportado no deja de serlo, ya que cumple la reglamentación
eco. La mayor parte de empresas exportadoras eco compensan las emisiones
de CO2. Ojalá la rigurosidad fuera igual con, por ejemplo, los camiones
con tomates venidos de Marruecos, que además de contaminar, impiden a
los productores locales españoles obtener precios dignos.
¿Podrían sustituir a
los sistemas convencionales y abastecer a una población de 7.000
millones de personas que pasará a 10.000 millones a finales de siglo?
¿La producción convencional puede? Recordemos la explotación humana,
el éxodo rural o la pobreza genética del planeta. La agricultura
ecológica está preparada, pero el problema es de distribución, de
especulación y del ansia de poder. Desde la ONU se señala la adopción de
prácticas agroecológicas como el principal desafío para asegurar la
alimentación de la población mundial, principalmente los más
vulnerables.
¿Cuánta agricultura ecológica hay en España?
Según el Ministerio de Medio Ambiente, en 2010 alcanzaba las
1.674.119 hectáreas, un 4.45% más que en 2009. Está a la cabeza de la
Unión Europea. Es el único sector en crecimiento, aunque muy despacio.
Es todavía vulnerable y no está en igualdad de condiciones con la
convencional.
Si realmente funcionara, ¿no debería ser rentable por sí misma?
Toda la agricultura, incluida la ecológica, depende de subvenciones,
porque entre otras razones al agricultor o al ganadero no se paga el
precio de su trabajo ni de sus productos. La producción eco, en general,
no demanda más ayudas que la convencional. En Europa se invita a pagar
un plus a los agricultores y ganaderos que presten "servicios
ambientales" a la comunidad. No son subvenciones, sino una justa ayuda a
un trabajo bien hecho.
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